El Tribunal Supremo ha decidido extender el plazo para presentar demandas por despido a 21 días hábiles, una medida significativa que puede influir en numerosos casos laborales.
Esta decisión responde a la necesidad de ajustarse a situaciones específicas en las que el plazo anterior de 20 días resultaba insuficiente.
Contexto y Justificación
Tradicionalmente, el plazo para reclamar por despido es de 20 días hábiles, según el Estatuto de los Trabajadores.
Sin embargo, la sentencia del Supremo, emitida el 26 de mayo de 2015 y reiterada en la reciente sentencia 727/2024, permite que este plazo se extienda a 21 días cuando la conciliación se presente el día 20.
Ejemplo de Aplicación
Un caso notable involucró a una trabajadora despedida el 1 de junio de 2022. Presentó la papeleta de conciliación el 4 de julio, dentro de los 21 días hábiles debido a días festivos. Aunque la conciliación no tuvo éxito, la demanda fue inicialmente rechazada por haberse presentado 22 días después del despido. El Supremo dictaminó que, dado que la conciliación interrumpe el plazo de caducidad, la acción estaba dentro del plazo.
Relevancia de la Conciliación
El Supremo subraya la importancia de la conciliación en el proceso laboral. Si el día 20 coincide con el acto de conciliación, se permite presentar la demanda hasta las 15 horas del día 21.
Esta extensión tiene como objetivo evitar que los plazos procesales perjudiquen injustamente a los trabajadores.
Interpretación del Tribunal
El Tribunal Constitucional ha establecido que la tutela judicial efectiva puede ser vulnerada por un formalismo excesivo.
En este sentido, el Supremo rechaza interpretaciones estrictas que no favorezcan al trabajador, enfatizando una aplicación más flexible y razonable de los plazos procesales.
Conclusión
Esta extensión del plazo para demandar por despido es un avance significativo en la protección de los derechos laborales.
Los trabajadores disponen de un día adicional para presentar sus demandas, lo cual puede ser crucial en situaciones donde el tiempo es un factor determinante.